La multinacional francesa Alstom plegará alas en España y emigrará de Galicia. Se irá tras aplicar un plan de ajuste en su división eólica que implicará la desaparición del grupo en la comunidad. Aquí cerrará la planta de ensamblaje de componentes electrónicos para aerogeneradores que posee en el municipio coruñés de As Somozas y el almacén de piezas situado Narón, en plena comarca de Ferrol. En total, 63 trabajadores indefinidos sobre los que pende la espada de Damocles del despido.
El grupo presentó ayer en París, ante representantes sindicales de sus empleados en toda Europa, un borrador de plan de ajuste de su negocio eólico en España que dejará su plantilla total (1.040 personas) reducida en un 36 %, pues están previstos 373 despidos. Además de la planta de As Somozas, el grupo cerrará la fábrica de torres en Altamira (Zamora). El ajuste afectará también a las oficinas centrales de Madrid.
La empresa informó de que «el plan de racionalización del proceso productivo» prevé concentrar en las instalaciones de Buñuel (Navarra) la fabricación de equipamientos eléctricos.
El cierre de la planta de As Somozas, donde Alstom aterrizó en el 2007 tras la compra de la compañía española Ecotecnia, tendrá una repercusión directa en el puerto de Ferrol, del que salían aerogeneradores procedentes de otras plantas.