Si al pobre no lo hubiesen jubilado en el 2009, Pelegrín, entrañable mascota del Xacobeo, estaría ahora haciendo sonar las vieiras como los andaluces tocan las castañuelas en esos saraos suyos. Encantado de la vida, desatado. No en vano, este 2013 pasará a los anales como el primer año en que llegaron a Compostela más de cien mil peregrinos extranjeros, algo que ni siquiera había ocurrido en aquel histórico 2010. Todo un señor récord reflejo del bum que vive el Camino de Santiago, de cuya declaración como patrimonio de la humanidad se cumplieron ayer 20 años. Coincidiendo con la efeméride, la Xunta anunció que designará al príncipe de Asturias primer embajador de honor de la Ruta.

A caballo, en bicicleta, en sillas de ruedas, en patines y, sobre todo, andando. Por el trazado francés, por el inglés, por el portugués, por el primitivo, por el del norte... Están arribando romeros a la capital gallega de todas las maneras posibles, por todas las vías reconocidas. Y desde todos los lados. Proceden, entre otro centenar largo de países, de Alemania, Estados Unidos, Canadá, Vietnam, Sudáfrica, Finlandia, Corea del Sur, Surinam, Togo, Brasil, Australia, Cuba, Israel, Irán y hasta de Irak. Un mar de pueblos, un crisol de culturas.




A pesar de la crisis económica y pese a que la estancia en los albergues públicos de la red autonómica se ha encarecido de golpe un 20 %, al pasar el precio por noche de cinco a seis euros, el globo no se desinfla. Al contrario, desde el 1 de enero hasta ayer, según datos facilitados por la Iglesia, concluyeron el Camino 214.929 personas, un 12,2 % más que en el mismo período del 2012, la marca más alta jamás registrada, excluyendo la del último Xacobeo. De ellas, como muestra el gráfico reproducido bajo estas líneas, 105.388 eran españolas y 109.541, foráneas. Y esta segunda cifra, la de los peregrinos extranjeros, sí que no encuentra parangón en ninguna otra época.

Ayer, en el acto de conmemoración del vigésimo aniversario de la distinción de la Ruta por parte de la Unesco, ninguna autoridad se refirió expresamente a estos números, pero todas vinieron a destacar que la cosa va como un tiro. El jefe del Ejecutivo autónomo, por ejemplo, subrayó la «extraordinaria vitalidade» del fenómeno de las peregrinaciones a Compostela.

Alberto Núñez Feijoo, además, aprovechó la ceremonia para comunicar que la figura institucional de embajadores de honor del Camino, creada por decreto en octubre, ya tiene su primera cara: Felipe de Borbón. En adelante, el hijo del rey promocionará internacionalmente la Ruta y sus valores. A su nombramiento, vitalicio, seguirán otros 15: siete personas físicas y ocho jurídicas.

Fuente: La Voz de Galicia