El tráfico en transporte público del Eje Atlántico (A Coruña-Vigo) rompe sus esquemas. La sólida estrategia iniciada en 2012 por Monbus, la compañía de autobuses que presta el servicio, le ha permitido en apenas dos años incrementar el número de usuarios en casi un 40% y al mismo tiempo acortar la distancia en pasajeros con el tren. Si en 2011 los vagones de Renfe trasladaron entre A Coruña y Santiago 736.545 viajeros más que el bus, en 2013 su ventaja había bajado ya hasta 665.403, lo que supone 71.142 casos menos. Además mientras el autocar en este tramo incrementó el número de usuarios en un 30%, en el caso de Renfe solo subió un 1% en los últimos tres años, al pasar de 985.000 a 989.000 casos.

En números absolutos, el tren también permanece imbatible en el corredor A Coruña- Vigo, donde en 2013 el autobús trasladó 24.390 pasajeros y el tren 421.000, si bien las distancias en este caso también se han acortado a favor del autocar. Al igual que en el caso anterior, la diferencia entre ambos medios de transporte baja en 5.810 usuarios. Y su evolución también es muy diferente porque mientras los viajeros de Monbus se duplicaron desde 2011, en el caso de los de Renfe apenas subieron un 2%. Los datos de pasaje ferroviario (no oficiales) contabilizan solo los servicios de Media Distancia y, al igual que los de autobús, registran los viajeros que se suben y apean en las terminales señaladas, no en las intermedias.




¿A qué se debe la nueva tendencia? Desde Monbus señalan dos "claves" en torno a las que la compañía fraguó una efectiva estrategia comercial en 2012: el precio del billete y las paradas. Desde entonces la empresa añadió dos tarifas nuevas a su pasaje simple -la opción del billete "ida y vuelta" y la reducción con el Carné Xove- que contemplan descuentos de hasta el 30%. Por esas fechas la firma gallega incrementó también sus paradas: en A Coruña, por ejemplo, sumó a la habitual de la calle Caballeros otra en la avenida de Alfonso Molina. En Santiago, pasó de dejar viajeros solo en la estación de autobuses a hacerlo también en Rosalía de Castro y la avenida de Lugo.

"Planteamos una estrategia comercial más agresiva, con más paradas y precios", explican desde Monbus. En su opinión, "la mayoría de los nuevos pasajeros antes viajaban en tren" porque "en época de crisis los pasajeros prefieren tardar diez minutos más con tal de ahorrar cinco euros".

Fuentes de la compañía reconocen que un número significativo del nuevo pasaje captado en los últimos dos años lo representan los estudiantes universitarios."En Santiago, antes era habitual ver todos los viernes a padres que venían a buscar a sus hijos que estudiaban en la universidad y los traían los domingos, pero hoy la mayoría van por su cuenta en transporte público", añaden. A ese trasvase de pasajeros desde el ferrocarril se sumaría el de los usuarios del coche particular y la AP-9. Entre ellos funcionarios que "se turnaban en un coche y ahora van también en otros medios" y que eligen el autobús en lugar del tren porque es "más barato" y les deja cerca de sus puestos de trabajo. Por ejemplo, en la capital compostelana la estación de autobuses está al lado de las dependencias de la Xunta en San Caetano.

El mejor reflejo del éxito de la campaña de Monbus es que, en ciertas jornadas, la compañía ha tenido que reforzar sus rutas "hasta con tres o cuatro autobuses" para absorber la alta demanda. Aún así, el transporte ferroviario también ha ganado adeptos del vehículo particular porque "los viajeros se dan cuenta al hacer cálculos que el importe del billete e incluso coger un taxi si lo necesitan al llegar a la estación les sale más barato que ir en su coche", destacan los sindicatos. Por eso, en los fines de semana la compañía ferroviaria usa trenes de doble composición -con el doble de plazas- en el corredor atlántico para atender la demanda. Además, añaden que el repunte es mayor desde que el año pasado el tramo A Coruña- Osebe (Padrón) cuenta con ancho de vía doble electrificada, lo que provoca que el viaje sea "más rápido".

Con la nueva política de precios de Monbus, las tarifas ya no son tan caras respecto a Renfe como en años anteriores. De hecho, en el trayecto A Coruña-Santiago -donde más competencia tienen del tren debido a las frecuencias y al tiempo de viaje- los billetes cuestan lo mismo: seis euros. Salvo en el Media Distancia más rápido cuyo precio alcanza los 7,20 euros.

El autobús es ya más barato que el tren tanto entre A Coruña y Pontevedra -11 euros frente a 13,35- como entre la ciudad coruñesa y Vigo con 13 euros que cuesta viajar con Monbus frente a los 15 o 17,75 euros en el caso del transporte ferroviario, según el billete.

En cualquier caso, las nuevas ventajas incorporadas en 2012 por el autobús equilibraron dos servicios con prestaciones similares. Si el bus enlaza A Coruña con Pontevedra en dos horas, Renfe lo hace entre una hora y media y dos horas en función de las paradas y la ruta realizada.

Tiempos similares se encuentran también entre A Coruña y Vigo, en función de la frecuencia que se escoja .Tanto Renfe como Monbus ofrecen rutas con un máximo de dos horas y media, tiempo que en el caso de los trenes varía a medida que lo hace el número de paradas. El autobús tarda dos horas y 30 minutos mientras la opción del tren varía entre una hora 59 minutos y las dos horas y 24 minutos.

La diferencia se nota bastante más entre A Coruña y Santiago, ya que ese trayecto en autobús dura como mínimo una hora por autopista y 30 minutos más si se va por carretera, y en trenes Avant o de Media Distancia el tiempo de viaje apenas supera la media hora.

En cuanto a las frecuencias, mientras que en los enlaces de A Coruña con Pontevedra y Vigo hay el doble de enlaces en tren, con Santiago son similares.

Fuente: La Opinión de A Coruña