El sindicato Unións Agrarias y la asociación de propietarios de los terrenos eólicos (Ventonoso) advirtió ayer de que la decisión del Gobierno central de suprimir las primas a la producción de energías renovables -y la reducción, en la práctica, de las que ya se están cobrando- supondrá "la puntilla definitiva" al concurso eólico gallego. Con esta medida, advierte, los propietarios rurales y Comunidades de Montes dejarán de percibir unas rentas aproximadas de 13 millones de euros al año por los 90 parques pendientes de instalación. A esto se suman un mínimo de 6 millones anuales por los parques ya existentes, lo que arroja un total de 19 millones de pérdidas al año.

El presidente de Ventonoso, José Antonio Diéguez, hizo ayer hincapié en "las consecuencias terribles" de la "retroactividad" de la medida del Ministerio de Industria, que ha atribuido a los intereses del "gran lobby eléctrico" y a la intención de "desmantelar" las posibilidades de los pequeños promotores. Además, denunció que algunos de sus asociados están acumulando "retrasos" en el cobro de los alquileres y equiparó el panorama de las energías renovables con el de la burbuja inmobiliaria. La "gran burbuja eólica", como la calificó, implicará, en un escenario sin primas y tras haberse inflado esta actividad, que "los promotores pequeños se vean abocados a vender a las grandes empresas o a entrar en suspensión de pagos".