El pasado 19 de febrero, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, anunció en el Congreso de los Diputados que Navantia construiría un nuevo buque para la Armada española. Las cábalas sobre si el encargo iría para la factoría de Ferrol o para la de Cádiz se sucedieron durante los dos meses y medio siguientes. El mejor colocado era el astillero andaluz porque los cuatro anteriores barcos, similares al anunciado ayer, se habían construido allí. Y las conjeturas acabaron. Al final no será uno, sino dos: uno se construirá en los astilleros gallegos y el otro, en los andaluces.

El misterio lo desveló ayer el presidente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Ramón Aguirre, que viajó sin anuncio previo a Santiago. Minutos antes ya lo había avanzado el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo. Aguirre aseguró que cada uno de los buques de acción marítima (BAM), que es el modelo que se ha elegido, generará 500 puestos de trabajo durante 30 meses. Poco después del anuncio, los sindicatos redujeron la cifra a poco más de 300, lo que supone un 15% de la actual plantilla del astillero ferrolano: 2.000 personas.




Cada buque tendrá un presupuesto de 200 millones y comenzarán a construirse "después del verano", según Aguirre. En la fabricación de cada uno se emplearán 1,1 millones de horas. El nivel de ocupación es muy similar al del flotel que ha encargado Pemex al astillero ferrolano: 1,2 millones de horas. En este caso, la carga de trabajo se estipuló para 350 empleados. En el momento de su anuncio se dijo que el flotel iba a suponer empleo para más de 900 trabajadores.

Sin previo aviso, el presidente de la SEPI acudió ayer al Parlamento de Galicia. Después anunció en rueda de prensa junto a Feijóo, el alcalde de Ferrol, José Manuel Rey Varela, y el conselleiro de Industria, Francisco Conde, el encargo de los nuevos buques militares. Hoy viaja a Cádiz para repetir el anuncio. Pero en este caso no tiene previsto reunirse con la presidenta de la Junta de Andalucía, la socialista Susana Díaz, sino que la cita será en la Delegación del Gobierno.

Feijóo agradeció expresamente al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, las gestiones realizadas para la construcción del barco. "Fue una de las peticiones formales que hicimos desde el Gobierno de Galicia al presidente del Gobierno", afirmó.

El presidente gallego aseguró que continuará trabajando para "conseguir más carga de trabajo" para Ferrol y destacó que el astillero ferrolano tiene carga de trabajo para los próximos 30 meses por un total de 400 millones, incluyendo el proyecto del BAM y el del flotel para Pemex, además de otros encargos, lo que supone "un alivio importante" y dibuja "un horizonte despejado" para el naval de la zona.

Lito Blanco, secretario del comité de empresa de Navantia Ferrol, tildó está última declaración de Feijóo de "excesiva" y recordó que el flotel y el barco de la Armada darán trabajo a 650 de los 2.000 empleados que tiene la plantilla principal del astillero. Desde que en diciembre se marchó el último buque de la Armada australiana, los astilleros de la ría no tienen carga de trabajo. "Es una buena noticia, pero necesitamos más explicaciones de cuándo empezarán los trabajos. Por eso hemos pedido una reunión con la dirección de la compañía", reconoció.

Blanco también destacó la similitud entre el anuncio del flotel que realizó Feijóo en la precampaña de las elecciones autonómicas de 2012 y el del buque militar "que se produce a dos días de que comience la campaña electoral para las europeas". "Hay que recordar el anuncio del flotel. Las similitudes son muy parecidas. También se produjo en Santiago, también antes de unas elecciones? y luego ya estamos viendo que aún no hay carga de trabajo", cuestionó.

El presidente del Comité de Ferrol, Ignacio Naveiras también tildó el anuncio de "electoralista" al vincularlo con la proximidad de las elecciones europeas. Aseguró que el contrato, aún sumado al encargo del flotel, "sigue siendo insuficiente y no es la solución del naval gallego". "Seguimos escépticos porque no hay una fecha concreta de inicio y la acción comercial es deficitaria", manifestó.

La dirección local de Esquerda Unida en Ferrol también utilizó el término "electoralista" para valorar el anuncio de la SEPI. Para esta organización política, "es deplorable cómo el PP juega con el desempleo y la exclusión social de la ciudadanía de Ferrolterra", señaló en un comunicado.

El alcalde de Ferrol, José Manuel Rey Varela, aseguró que "el dato más relevante" del anuncio hecho ayer en Santiago es que se trata del "primer pedido que le hace el Gobierno a través de la SEPI a los astilleros públicos gallegos en los últimos ocho años".

Por su parte, el secretario xeral del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, instó al presidente de la Xunta a "comprometer su puesto para apostar por el dique flotante de Ferrol".

Fuente: La Opinión de A Coruña