No dan palmas de alegría, pero casi. Los diferentes actores del sector turístico gallego tenían miedo al arranque de la campaña de verano. Otro año a la baja como el anterior supondría el desplome de los ingresos, más números rojos y, en consecuencia, el cierre de más establecimientos. Por eso, la "percepción positiva" de la llegada de más turistas a la comunidad durante las primeras semanas del mes de julio les ha animado. Todavía no disponen de datos oficiales pero calculan que la entrada de viajeros en el arranque de la temporada estival se ha incrementado entre un 2% o un 3%, con respecto al año pasado. Este aumento deja la tasa de ocupación entre un 65% o un 70%. Su previsión para agosto es del 75%.

Las buenas perspectivas para la campaña veraniega quedaron ratificadas la semana pasada cuando el Instituto Nacional de Estadística (INE) divulgó la cifra de viajeros alojados en los establecimientos hoteleros gallegos en junio: un 8,6% más respecto al mismo periodo de 2012. La entrada de turistas extranjeros está detrás de este aumento.




"No tenemos datos oficiales de cómo fue el mes de julio, pero hay una percepción positiva de que hay más turistas que otros años. Es cierto que hay más gente de fuera. Es un sentimiento generalizado, aunque luego los datos fríos nos pueden decir otra cosa", asegura Héctor Cañete, presidente de la Confederación de Empresarios de la Hostelería de Galicia.

La misma percepción la tiene Francisco Canabal, presidente del Gremio de Hoteles de Galicia. "Durante julio la ocupación ha subido entre un 2% y un 3% más que el año pasado hasta colocarla entre el 65-70%. No es un gran aumento, pero siempre que vaya subiendo es positivo", apunta Canabal, quien avanza que entre enero y agosto la ocupación se va a incrementar un 4% con respecto al mismo periodo del año pasado. Reconoce además que se ha notado un incremento de turistas extranjeros, sobre todo procedentes de Inglaterra y Holanda. Eso sí, la estancia media sigue siendo muy similar a la del año pasado: entre 1,9 y 2 noches por viajero.

El sector está contento con este incremento, pero la clave es conocer "el gasto medio". "A cuánto hemos vendido las habitaciones", advierte Cañete. Canabal explica que este aumento de turistas lo están consiguiendo con "el sacrificio de los precios", que siguen bajando. "Por desgracia sí", se lamenta. El presidente del Gremio de Hoteles de Galicia aclara que los turistas nacionales "gastan lo menos que pueden" y que "todo el mundo busca los menús del día".

Según los datos del INE, los precios hoteleros experimentaron en junio en Galicia un recorte del 4,1%, con una facturación por habitación ocupada de 50,5 euros de media, lo que supone un 6,5% menos con respecto al año pasado, y unos ingresos por habitación disponible de 17,1 euros, un 7,8% menos.

Canabal es contrario a la bajada de los precios. "El que va a venir, va a venir igual. Al final se pierde dinero", explica. "Muchos de los hoteles que hay en Galicia son de cadenas nacionales o internacionales que van a la cuenta de resultados y no les importa bajar los precios aquí porque los compensan con otras zonas. Si tú los subes, ellos los bajan y no podemos hacerlo", afirma.

Pese a todo, Héctor Cañete insiste en que están "contentos". "Hay un moderado optimismo", confirma. El presidente de la Confederación de Empresarios de la Hostelería de Galicia apunta que una de las claves del crecimiento de turistas en A Coruña es el acuerdo con Globalia para la promoción turística de la ciudad, que implicó también la llegada de Air Europa al aeropuerto de Alvedro en junio. "Las campañas empiezan a dar sus frutos. El acuerdo con Globalia es muy importante. Yo siempre he dicho que esta acción era muy importante para el turismo de A Coruña", señala.

Según las previsiones de Air Europa, la nueva ruta aportará anualmente unos 250.000 pasajeros a Alvedro y se crearán cien puestos de trabajos directos e indirectos. El convenio firmado con Globalia representa una buena operación comercial para la venta del destino A Coruña, ya que el grupo dispone de más de mil agencias minoristas y una gran estructura mayorista que trabajará en la promoción turística y empresarial de la ciudad.

Fuente: La Opinión de A Coruña