11 Dec 2013 | 11:31h
La deuda total de Pescanova se dispara y supera los 4.200 millones
Hablaba de «discrepancias contables» el expresidente de Pescanova, Manuel Fernández de Sousa, para no presentar a la CNMV en febrero los preceptivos estados contables de la sociedad. Y esas discrepancias se han convertido en una brecha de proporciones gigantescas y difícil sutura.
Así lo confirman las cuentas consolidadas del 2012, remitidas ayer al supervisor bursátil por Deloitte, administrador concursal de la compañía. Se dibuja un panorama aún peor del conocido hasta el momento, con una deuda total de 4.218 millones de euros al cierre del ejercicio, un agujero patrimonial de 1.487 y unas pérdidas de otros 791,4. El único parámetro que sí tuvo una evolución positiva fueron las ventas, de 1.465 millones. Crecieron un 8 % sobre el cierre del 2011.
Nada que ver, todo lo anterior, con la salud contable que año tras año certificaron ante la CNMV el equipo directivo que lideraba Fernández de Sousa y la auditora externa, BDO, que también firma, por primera vez con salvedades, las depositadas ayer. Unos y otros están imputados en la Audiencia Nacional por la presunta comisión de un rosario de delitos societarios, entre ellos falsear la información económico-financiera.
Y es que frente a los 50 millones de beneficios declarados por Fernández de Sousa para el 2011, la reformulación contable de Deloitte arroja unas pérdidas de 260 millones, que el año pasado se triplicaron, alcanzando los 791 millones.
Fuente: La Voz de Galicia