Nacido de las antiguas Caixanova y Caixa Galicia (fusionadas en diciembre del 2010), NCG Banco plantea su futuro a corto plazo con un tamaño similar al de la primera (37.000 millones en activos), y con un beneficio similar al del mejor año de la segunda (200 millones anuales, antes de impuestos). Será así desde el 2016, según se desvela en el plan de negocio que ayer hizo público la Comisión Europea. La entidad ganará más dinero a medida que pase el tiempo: de 19 millones este 2013, a entre 200 y 300 en el 2016. Y recortará su tamaño de forma progresiva. Más pequeño y más saneado. Así se presentará ante potenciales compradores: mejor cuanto más tiempo se le dé al proyecto.
Tras un rescate de 5.425 millones, Bruselas desveló el proyecto de la entidad, aunque borrando datos confidenciales. El documento especifica que el banco tendrá un tamaño un 40?% inferior al actual (de 65.000 millones en activos a esos 37.000), con la venta o cierre de su red de fuera del noroeste, y centrado en el negocio tradicional.Seguir con entre 3.000 y 4.000 empleos. Esa es la hoja de ruta planteada a partir del 2015, con un recorte de hasta el 40 % sobre la plantilla de enero del 2012. Hay que tener en cuenta que Bruselas no habla técnicamente de personas, sino de FTE, empleados a tiempo completo (en sus siglas en inglés). El ERE aprobado por la entidad y los sindicatos mayoritarios va en esa línea, con el cierre de oficinas, reducciones de jornada y recorte de 1.260 puestos (al margen de Evo). El grueso del ajuste será entre el 2013 y el 2015.